El difícil camino de regreso a… ¿casa?

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CIUDAD JUÁREZ, Méx. — Después de la odisea —de México a una vida construida sobre un sueño americano— el retorno a su país natal, ahora desconocido, es un reencuentro desafortunado para un inmigrante de Zacatecas.

Con más de 10 años de residir en los Estados Unidos, Julio [pidió que no se usara su apellido], fue deportado de vuelta a una tierra que ahora resulta más ajena que la nueva. Él se vio forzado a dejar a su mujer y bebé de nueve meses en Kansas luego de ser detenido por las autoridades y tener que enfrentar un proceso de repatriación.

“Tuve una vida de aventuras, anécdotas buenas y malas, sorpresas y humillaciones, fue difícil”, confesó Julio en una noche fría luego de su ingreso a la Casa del Migrante en Ciudad Juárez. Ahora sólo le falta conseguir el dinero para el viaje a casa, y por el momento dijo, no le queda más que explorar sus opciones en una frontera agobiada por la violencia y la inseguridad.

Dibujos e ilustraciones dejadas por los repatriados en La Casa del Migrante de Ciudad Juárez (Perla Chaparro/Borderzine.com)

Dibujos e ilustraciones dejadas por los repatriados en La Casa del Migrante de Ciudad Juárez (Perla Chaparro/Borderzine.com)

Como protegiéndose de la obscuridad también arribaron recientemente Natalia y Lourdes, dos mexicanas que habían pasado el día tratando de informarse sobre los programas de atención a migrantes del gobierno municipal.

Para luego dirigirse al punto de encuentro —Puente Internacional de Santa Fé— del transporte hacia la Casa del Migrante.

“Adaptarse es muy difícil, lo estoy viviendo en carne propia y no se lo deseo a nadie”, dijo Natalia, oriunda de Veracruz y madre de dos pequeños nacidos en Estados Unidos durante nueve años que residió Kansas City con su ex pareja.

“Mi vida era puro trabajar, a mi casa, hacer de comer, me metí a una escuela de inglés y ya el día de descanso salir con la familia”,  dijo la mujer de 28 años más serena  y meditando sobre su vida pasada.

Las  historias de separación de familias, amigos y pertenencias se repiten a diario y dejan como prueba, los múltiples dibujos de seres queridos e imágenes religiosas que invocan sobre todo a la Virgen Morena, pegados en una pared del lugar y que muestran su sentir durante su aprensión.

“Entre más perfecto sea el dibujo, significa que la persona duró mucho tiempo detenido”, dijo una de las encargadas de la Casa.

Durante el 2008 casi 1.2 millones de inmigrantes fueron deportados del país, de acuerdo al reporte de nombre Immigration Enforcement Actions: 2008,  del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).

La patrulla fronteriza detuvo a 723,840 personas, se estimó que 59,578 eran menores de 18 años y 117,061 mujeres, según datos de la organización The Refugee Voice.

“Cuando ellos vienen a nuestra entrevista entre 6 y 8 de la noche, luego de haber estado esposados encadenados, hay tristeza y un sentimiento de fracaso. Hay gente que tenía mucho tiempo allá, tenían una familia, un negocio o mucha experiencia en trabajos y de pronto se ven en México sin nada, es una tristeza profunda”, dijo Gerardo Arias, coordinador del proyecto migrante.

El religioso de la orden dominica indicó que la población de la casa  se duplicó en 2009 con casi 7,000 personas que buscaron refugio, en comparación al promedio anual de los 3,500 individuos de años anteriores. A las personas deportadas se les provee refugio y alimentos, pueden quedarse de uno a tres días, dependiendo de la situación, se informó.

En ese jueves el grupo de alrededor de 20 personas fue instruido sobre la actual situación en la ciudad fronteriza.

“Ellos vienen temerosos, todos que saben que van a salir por Ciudad Juárez tienen miedo, así que les damos instrucciones, que se acompañen varios cuando salgan arreglar su partida”, mencionó Arias.

Agregó que en ese despertar a una nueva realidad muchos se encuentran entusiasmados de regresar a su lugar de origen, pero otros quieren ir de inmediato a Estados Unidos porque ya han dejado allá una historia.

“Hay gente que prácticamente nació allá, porque desde bebés los han llevado a Estados Unidos, y nunca han vivido en México ni conocen a su familia y tienen que ir hacia allá”, dijo Arias.

La idea de tratar de cruzar de nuevo ya no pinta como antes, lo que un día fue el sueño americano al poder enviar dinero conocido como remesas a parientes parece ya no interesar a las dos mujeres mexicanas.

“Yo nunca había estado en un lugar así, me traumó cuando me detuvieron, mi mamá se enfermó al saber y ya no quiero afectar a mi familia, prefiero estar en México sufriendo, dijo Lourdes de 26 años originaria de Ometepec, Guerrero.

“Ya no quiero pasar por esto, es difícil porque mis hijos se están perdiendo de muchos beneficios que tienen”, señaló Natalia.

La mayor preocupación de las mujeres yace ahora en el cómo regresar, lo cual es difícil con bolsillos vacios, y sólo el 25 por ciento del boleto a casa pagado por el gobierno municipal.

Atravesando por la misma situación económica, Julio expresó que ahora comienza un nuevo camino por  recorrer, palabras dichas en su primer día de libertad después de 7 meses de detención.

“Te privas de tu familia, yo viví en varios estados, es bonita la vida allá pero se pierde tu tiempo, mi hijo es lo único, lo digo a mis 35, porque el dinero que he hecho ya no importa”, confesó Julio.

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Para más información o donativos a la Casa del Migrante en Ciudad Juárez, llamar al teléfono (656) 687- 0676 o acceder a www.migrante.com.mx/Juarez.htm

2 thoughts on “El difícil camino de regreso a… ¿casa?

  1. Ayúdame a localizar a unas personas q emigraron hace una semana no se nada de ellos por favor ayudenme

  2. La informacion de la casa del migrante con sede en Cd. Juarez esta al final de la nota. Espero sea util la informacion.

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