El placer vicario de espiar al otro

EL PASO – Seré honesta: no es algo de lo que me sienta orgullosa pero yo soy de esas que disfrutan, de vez en cuando, el placer vicario de espiar al otro en mi buscador. Póngamoslo de esta manera: usted está en una conversación y se habla de una persona a quien no conoce, su nombre se repite y se repite, se dice esto y lo otro de dicha persona y usted permanece completamente perdido. ¿Qué hace? Si usted es listo y se siente en confianza preguntará quién es esa persona, indagará detalles, tal vez lo conozca y no lo sabe. Yo me voy por el camino fácil.

Dime qué lees (o qué no lees) y te diré quién eres

En menos de una semana la reputación de un político mexicano se vino abajo (aunque tampoco es que la tuviera muy alta). Y todo por un asunto literario. El precandidato a la Presidencia en México, Enrique Peña Nieto, asistió a la Feria Internacional del Libro en Guadalajara para presentar su libro México la Gran Esperanza una obra con la cual Peña Nieto pretende expresar: “hacia dónde creo que podemos transitar en los próximos años. Una obra que aborda los que, a título personal, considero los mayores desafíos, retos y oportunidades de México”[1]. Pero el mayor desafío durante este evento ocurrió al final de la presentación.

Ciudad en cenizas, o cómo vivir una vida a lo gringa movie

I suspect our city
will soon be laid to ashes
Our island city
Rowing out over the river in the dark
They have divided. Eleni Sikelianos
EL PASO, Texas — Una sabe que las cosas no andan bien del otro lado cuando lee el periódico, lee las notas en Internet, escucha los helicópteros por las noches o los comentarios de queja, enojo o lamento en redes sociales como Twitter o Facebook. Una sabe que Ciudad Juárez lo está pasando realmente mal. Una, además, tiene el descaro de enterarse de todo esto desde la comodidad de su hogar en el otro lado, en El Paso. No es lo mismo, en efecto, que Una se duela de lo que ocurre más allá de la línea cuando se está aquí.

El día de-morado

EL PASO, Texas — En Uganda un periódico publicó fotografías de los que llamó “Los 100 principales homosexuales” para invitar a la gente a atacarlos. Un año antes un legislador presentó un proyecto de ley que condenaba a la pena de muerte o cadena perpetua a cualquiera que llevara a cabo actos homosexuales. ¿Será posible que en pleno Siglo XXI la homofobia sea aún como ese moño que se cuelgan otros activistas sociales? Hoy, en Estados Unidos la gente viste de morado en una forma de hacer conciencia y hacerle frente a la intolerancia que recientemente ha cobrado la vida de 6 chicos, víctimas en cierto modo del abuso homofóbico en hogares y escuelas. Uno, camina por la calle y de entre todos los colores se distinguen —como pequeños brillos— los puntos morados.

El periodismo hoy: el oficio de pulir huesos

EL PASO, Texas — En el Museo de la Universidad de Texas en El Paso se inauguró recientemente “Las otras batallas” una exhibición que ofrece el trabajo de un grupo de fotoperiodistas de El Diario de Juárez. Es imposible recorrerla sin sentir un escalofrío, sin ponerse a pensar que esa imagen que está ahí es una estampa del realismo más crudo. Es imposible ver cada una de esas fotos sin pensar que quien lanzó el clic es prácticamente un héroe. Octavio Paz escribió una vez “Hablar mientras otros trabajan es pulir huesos”. Esas líneas me hacen pensar cómo, en los últimos años, para un periodista trabajar se ha vuelto una forma de pulir huesos.

Pat Mora loves a place

EL PASO, Texas — Durante la presentación de Pat Mora, una de las escritoras más queridas por la comunidad mexico-americana, especialmente la de Texas, el público pudo escuchar de la voz de la escritora algunos fragmentos de su obra, sus ideas sobre la importancia de leer y de enseñar, pero quizá lo más importante fue saber lo que ella siente por esa ciudad. En un auditorio lleno, Pat Mora inició diciendo que para ella era muy especial estar ahí, este es el lugar al que su padre llegó cuando dejó Chihuahua, el lugar donde nació su madre, donde nació ella y donde nacieron sus hijos. “En Mesita se acababa la ciudad”, dijo. Ofreció diversos y ricos detalles sobre una ciudad de El Paso muy lejana a la actual. Pero lo más importante fue cuando Pat dijo: “Love a place, one is full when one loves a place.”

¿Cuántos de los que estaban en ese auditorio aman un lugar?