Crecí escuchando a Juan Gabriel, y será siempre parte de mi

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"Gracias por hacer de esta la frontera más fabulosa y bella del mundo" Photo credit: Valeria Terrazas

La familia de Alberto Aguilera Valadez es la más afligida por su muerte el 28 de agosto. Sin embargo, hay otra familia que también lo lloran, la que lo vio convertirse en el cantante Mexicano de fama internacional Juan Gabriel – todo Juárez.

Para mi y mi familia su música ha sido y sigue siendo parte de nuestras vidas diarias. Puedo recordar innumerables episodios que fueron marcados con canciones del Divo de Juárez.

Mi madre, como muchas señoras de su generación, era ávida fanática de las letras de Juan Gabriel, y casi a diario traía un casete sonando en la camioneta. Por ello no recuerdo el momento exacto en que lo escuché por vez primera.

Recuerdo cuando viajábamos a acampar. Mis papás y mis tíos se quedaban despiertos hasta tarde alrededor de la fogata cantando, mientras mis primos y yo dormíamos, o eso pretendíamos, esperando a que mi padre gritara a todo pulmón “QUERIDA!”, en su tono más agudo pidiendo esa canción. Nos daba risa porque dos cosas se hacían evidenciar: ese era el momento cúspide de la noche, y mi papá ya estaba borracho.

Casa de Juan Gabriel, 31 de agosto, 2016

Flores y Mariachi Photo credit: Valeria Terrazas

Uno de mis tíos viajó a otras ciudades únicamente para ver a Juan Gabriel más de una vez, y lamentó mucho su muerte. Esto me resulta un poco incongruente porque ese mismo tío suelta chistes machistas de vez en cuando, a punto de mostrar un poco de repudio hacia los hombres homosexuales o afeminados. Al mismo tiempo, el nunca dejó de admirar al cantante Mexicano que se especulaba era bisexual.

Cuando yo tenía ocho años conocí lo que era pasar un luto cuando mi tío favorito, a quien siempre vi como una extensión de mi padre, falleció inexplicablemente. A esa edad por primera vez entendí lo que era llorar de tristeza con una canción de Juanga, “Amor Eterno”. Todavía se me cierra la garganta cuando escucho esa canción.

En las noches de fiesta, no sólo entre las personas de mi edad, sino en toda fiesta en Juárez, al final de la noche es común el afamado himno de Juan Gabriel a nuestra ciudad: “Ciudad Juárez es el número uno, Ciudad Juárez es el number one, y la frontera donde debe vivir dios”.

Aun cuando recordamos las historias de drogas y sangre que nos ganaron fama internacional como la ciudad mas peligrosa del mundo, sentimos orgullo cuando Juan Gabriel nos recuerda en canción que Ciudad Juarez es “la frontera más fabulosa y bella del mundo”.

Casa de Juan Gabriel, 31 de agosto, 2016

Recortes de periódico en el homenaje a Juan Gabriel Photo credit: Valeria Terrazas

Cuando se supo que había muerto Gabriel, horas antes de viajar a El Paso para presentar un concierto, las estaciones de radio locales programaron incansablemente las canciones Juan Gabriel por tres días seguidos.

La cobertura de los medios nacionales e internacionales mostraron la reacción de los fans alrededor del mundo y se formaron en muchas partes homenajes espontáneos en lugares que representan de algún modo el legado del artista.

El homenaje que se le organizó en Ciudad Juárez conglomeró a más de 40,000 personas frente a su casa, ubicada en la Av. 16 de Septiembre en la zona centro de la ciudad, un cuadrante de la ciudad que no tiende a ser concurrido más que por los comerciantes del sector.

Es larga la lista de cosas que Juan Gabriel logró en vida por las que fue tan fácil admirarlo; nacido en Parácuaro Michoacán en 1950, llegó a ser el máximo compositor mexicano, cerrar el abismo entre la cultura popular y la “alta cultura” al presentarse en el Palacio de Bellas Artes, y ganarse un título como uno de los iconos del movimiento LGBTTI por sus modos y modas.

Y aunque Juan Gabriel se volvió reconocido por la comunidad LGBTTI aun sin proponérselo, el muralista juarense Arturo Damasco inmortalizó esa esencia del Divo en su mural homenaje apenas inaugurado el año pasado, en el que cita al cantautor: “Felicidades a todos aquellos que se sienten orgullosos de ser como son”.

Casa de Juan Gabriel, 31 de agosto, 2016

Rosas sobre la placa de Juan Gabriel Photo credit: Valeria Terrazas

 

 

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