Nos quedaron a deber

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CIUDAD JUÁREZ, México — Si hay alguien que admiro por su inteligencia es Yolanda. Una mujer interesada por la comunidad, la sociedad y todo lo que sucede a nuestro alrededor. A pesar de ser madre de tiempo completo y de que toda su vida ha trabajado, siempre tiene tiempo para ver los noticieros tanto de Ciudad Juárez como de otras ciudades. No hay día que no se siente cómodamente a leer el periódico enterito. Su parte favorita son las columnas de escritores, periodistas y políticos. Cada vez que tiene oportunidad opina sobre lo que esta pasando en el mundo y en nuestra ciudad.

Hoy, domingo 6 de diciembre del 2009 se levantó muy temprano con la convicción de hacer algo por su ciudad. Hoy, cuando más que nada los ciudadanos de Juárez lo necesitamos tanto, se decidió por aportar su granito de arena y participar en la lucha para que Juárez tenga paz. De hacerle saber a los gobernantes que no estamos conformes con lo que esta pasando en el país.

La marcha se suponía empezaría poco después de las 12 del día, hora en la que fueron citados todos los ciudadanos. Sin embargo al llegar a la megabandera que está sobre la avenida Heróico Colegio Militar, nos topamos con la sorpresa de que a las 12 y media aún no se lograba ver a más de mil personas. Es cierto que poco a poco fue llegando más gente cada vez, pero para la pasión que llevaba Yolanda dentro, esperaba multitudes con los ánimos por los cielos y una voluntad enorme para iniciar la marcha. Estuvimos un buen tiempo esperando. Se podía ver gente de todas clases sociales, a los conductores de varias cadenas de televisión, empresarios, niños, estudiantes y demás. A pesar de nuestra presencia, a la mera hora se sentía la necesitad de llevar más apoyo a la marcha como pancartas exigiendo que el gobierno haga algo o banderas blancas para acrecentar el ambiente que se vivía y la paz que se pide.

Inicio de la marcha ciudadana "Solución para Juárez"

Inicio de la marcha ciudadana "Solución para Juárez" (Ana G. Monsalvo/Borderzine.com)

Poco a poco nos fuimos alineando, “formen líneas de 10 en 10 a lo ancho de la calle” nos decían al mismo tiempo de animarnos a pedir por la paz y a hacer el recorrido con ánimo.

Yolanda inmediatamente se acomodó y se preparaba para comenzar el recorrido aunque aún seguía preocupada porque fuera llegando más gente a apoyar.

También podía observarse una gran cantidad de periodistas haciendo entrevistas, tomando fotos y videos del tan esperado evento.

Salimos como a la una de la tarde. Gritamos consignas como “Juárez por la paz,” “Se ve, se siente, Juárez esta presente” y “Juárez unido, jamás será vencido”. Ella gritaba entusiasmada cada vez que podía.

Nunca había acudido a una marcha, así que mientras ella continuaba viviendo el momento, yo decidí ir a observar qué sucedía en otras partes de la caminata. No estábamos muy alejadas del inicio por lo que intenté ver hasta donde llegaba el final, sin embargo podía ver gente hasta donde me alcanzaba la vista.

Había gente sosteniendo grandes banderas y globos blancos, pancartas mostrando su indignación y pidiendo justicia; señoras, creo pertenecientes a una iglesia, que sostenían hojas con la letra de canciones que en conjunto iban cantando; niños chiquitos que agarrados de la mano de sus papas mostraban su mano con orgullo haciendo la señal de paz; señoras de edad adulta que a pesar de la dificultad para caminar, estaban presentes. También había gente en grupos como unas monjas que me parecen pertenecían a una escuela católica, gente que pertenecía a organizaciones que otorgan ayuda ciudadana y familias enteras. Estaba un grupo de señoras que eran las mamás, hermanas y amigas de las tantas niñas desaparecidas que no se cansaban de gritar que querían justicia.

Cuando regresé a donde estaba Yolanda, se le podía observar cada vez mas entusiasmada. Recuerdo haberla oído decir antes de llegar a la marcha que por nada del mundo quería hablar en público o ser entrevistada. Bueno, pues fue tanta su emoción, su entrega y su pasión que andaba buscando quien la entrevistara porque tenía mucho que decir. No logró que esto pasara más sin embargo, venía ansiosa por oír lo que tuvieran que decir los oradores que nos esperaban en las afueras de la presidencia municipal.

Al preguntarle que tenía que decirle a los medios, me dijo que quería decirles que su participación en la marcha era para decirle al presidente de la República que Juárez también es México. Que cada vez que él aparece en los anuncios diciendo que la violencia está disminuyendo, es una burla, un golpe y una cachetada para los juarenses y todos los que vivimos en las ciudades fronterizas.

Fuimos llegando poco a poco todos los que veníamos en la marcha. Afortunadamente, nos tocó en mero enfrente y pudimos observar todo de primera mano.

Los discursos fueron presentados por el Dr. Arturo Valenzuela, un hombre no sólo reconocido por ser un buen especialista en cirugía general sino también por formar parte del Comité Médico Ciudadano.

Organizadores arengando a los participantes de la marcha

Organizadores arengando a los participantes de la marcha (Ana G. Monsalvo/Borderzine.com)

Y así sucesivamente, hablaron un maestro de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, una doctora en representación del Comité Médico Ciudadano y un joven que no alcancé a oír a quién representaba, pero cuando comenzó a hablar, lo hizo con un sentimiento y una enjundia que prendió a la gente. Cuando Yolanda escuchó al joven que pedía nuevas formas para que se otorgaran espacios de diálogo entre ciudadanos y gobierno para juntos sacar adelante a Juárez y mantenerlo alejado de este ambiente de violencia en el que estamos viviendo, se le podía ver la cara de orgullo, de aceptación a lo que proponía. La gente gritó y aplaudió emocionada cuando dijo que no podían permitir que las políticas públicas que se implementan en Ciudad Juárez, fueran creadas en un escritorio, que era necesario que se tomaran en cuenta las necesidades de los ciudadanos.

Sin embargo, al continuar los demás discursos comencé a notarla inquieta, seria y pensativa. Noté que la gente comenzaba a dejar de aplaudir y muchos incluso a irse con cierto aire de desánimo.

Después me di cuenta que los demás oradores se concentraban en decir cosas que ya todos sabíamos como el que hay secuestros y el cómo nos está afectando la violencia. Pero nadie más nos dio soluciones sólidas. Se mencionó el pedir ayuda a los Estados Unidos pero no se dijo de qué manera o qué era lo que pediríamos en concreto.

Me acerqué a Yolanda y al preguntarle porque estaba tan inquieta, comenzó a decirme lo defraudada y desilusionada que estaba al oírlos hablar sin fervor, ni ánimo ni pasión. Ella sintió que les faltó hablar con el corazón. Esperaba que alguien como el Presidente municipal José Reyes Ferríz acudiera al llamado. También me dijo que ella esperaba que a la marcha acudieran mínimo un millón de personas o si no, al menos un número cercano a eso. Se decía que éramos como cuatro mil personas, pero no creo que hubiéramos llegado a eso.

Es verdad que los juarenses estamos cansados de la violencia que nos sobrepasa día a día, pero ¿qué tiene que pasar, para que todos tanto los ciudadanos que no acudieron como las autoridades respectivas hagan algo? ¿Cómo podemos quejarnos si cuando tenemos la oportunidad de hacer algo, no lo hacemos? ¿Por cuánto tiempo estaremos así? ¿Qué pasa si no tengo a donde correr? ¿Qué pasa si un día a mi me toca pagar cuota y no tengo cómo pagar? ¿Tendré que esperar cruzada de brazos a que vengan a balacear o hacerle daño a mi familia?

Yolanda y yo no hablamos en todo el camino de regreso. Caminábamos pensativas cuando de repente una camioneta con vidrios polarizados pasó a nuestro lado por algunos segundos y al abrirse una ventana pudimos observar a cinco tipos con cara de malandros, libinidosos y con unos ojos llenos de cinismo. Nos volteamos a ver y sin más esperanza, tan sólo continuamos caminando.

6 thoughts on “Nos quedaron a deber

  1. Que buen punto de vista neutral… y ademas con sentimiento.. pude sentir como aumentaba la preocupacion de la señora y como definitivamente faltaron cosas por hacer…

    Gracias por hacer su esfuerzo por mantener al pendiente y al tanto.

  2. Que reportaje tan interesante!! Se nota el sentimiento y la decepción en cada palabra. Es una pena que no se haya logrado el objetivo, y que la comunidad haya hecho caso omiso a este llamado. Pero lo entiendo un poco ya que todos tenemos miedo. Creo que es difícil llegar a un número tan grande como el que la señora Yolanda quisiera, tal vez se necesite un movimiento publicitario enorme, y que como se menciona en el reportaje asistan los altos mandos, esto sería una motivación para la ciudadanía. Felicidades Gabriela M. que buen trabajo!!!!! Definitivamente esto es lo tuyo!!!!!!

  3. Si todos los Juarenzes tuvieramos la pasion que tiene la senora Yolanda y unidos podriamos por lo menos exigir a nuestros gobernantes la paz que desde hace mas de dos anios no es participe en nuestra ciudad, ya es justo que hagan algo, felicidades por involucrarte asi en este tipo de actividades!

  4. Muchisimas Felicidades por tu reportaje Gaby! Me da mucho orgullo que estes tan involucrada en las situaciones que disturban a nuestra sociedad.

    Excelente reportaje!

  5. Te quiero felicitar por tu reportaje Gaby, esta super bien echo, siguele echando ganas!! vas a ser super buena periodista!!!

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